«... si la mujer no hubiera existido más que en las obras escritas por los hombres, se la imaginaría uno como una persona importantísima; polifacética: heroica y mezquina, espléndida y sórdida, infinitamente hermosa y horrible a más no poder, tan grande como el hombre, más según algunos. Pero esta es la mujer de la literatura. En la realidad, como señala el profesor Trevelyan, la encerraban bajo llave, le pegaban y la zarandeaban por la habitación. De todo esto emerge un ser muy extraño, mixto. En el terreno de la imaginación, tiene la mayor importancia; en la práctica, es totalmente insignificante». Esta es una cita extraída de un texto de referencia para el feminismo: Una habitación propia , de Virginia Woolf. Por lo que a mí respecta, me da que más de uno que presume de cultura ni siquiera lo ha ojeado, ni ese ni nada más interesante que que no sean los panfletos condenados por la justicia de Alfonso Ussía o de Salvador Sortres (por poner el foco en dos de los más contumaces machist...
Blog personal de Daniel Moscugat. Cultura en general. Literatura en particular. Expansión creativa.